En ocasiones es difícil saber si una cobaya tiene sobrepeso o no. Siempre dependerá de factores como la raza y la complexión, como en las personas. Pero una buena guía es saber que, en términos generales, una cobaya adulta –a partir del año de edad- suele pesar entre 900 gramos y 1,3 kilos, aunque algunos machos pueden alcanzar el kilo y medio.
Debemos estar atentos al peso de nuestra cobaya, porque es un indicador fundamental para conocer la salud del animal. Es malo que esté por debajo de su peso, pero también lo es que tenga sobrepeso.
¿Qué podemos hacer?
Intentaremos que adelgace revisando su dieta e insistiremos para que haga más ejercicio.
En cuanto a la dieta, cómo sabéis, la alimentación de las cobayas se compone esencialmente de heno –fuente de fibra e indispensable para una correcta función intestinal-, fruta y verdura variada –que le aporta vitaminas, fibra y minerales- y pienso –que es lo que más les suele gustar y lo que más les engorda porque les aporta hidratos de carbono, además de los correctores minerales.
Por lo tanto, lo primero que debemos hacer cuando nuestra cobaya tiene un problema de sobrepeso es reducirle la cantidad de pienso y aportarle más heno a su dieta. Seguramente no le gustará tanto, pero si tiene hambre se lo comerá. Para facilitarle el cambio y hacerle más soportable la dieta podéis probar con distintas variedades de heno. Sabéis que existen muchos henos con flores y frutos de distintos sabores. Dadle este capricho.
La otra medida –que debe ser paralela- para lograr que nuestra cobaya pierda peso es que haga ejercicio “clic aquí”. Si tenéis espacio, construidle un cercado y que corra y se divierta dentro de él. Ponedle juguetes –las bolas y los túneles de heno son muy indicados para ello. De esta forma conseguiréis vuestro objetivo y vuestra mascota estará más saludable y se lo pasará bien.