El nombre científico del hurón, es como mínimo curioso: mustela putorius furo. Este animal pertenece a la familia de los mustélidos, subespecie del turón. El hurón adulto puede alcanzar una longitud entre 25 y 60 cm. y un peso de 500 a 2000 gr. siempre teniendo en cuenta que los machos son más grandes que las hembras, además su esperanza de vida es de 8-10 años. El hurón es un excelente animal de compañía, más parecido al perro que al gato, que no necesita de paseos por la calle ni de una atención constante.
Es muy posible que si adquirimos un hurón, al llegar a casa y durante un par de días, éste nos muerda sin llegar a hacernos daño de verdad. Esto se debe a que la única defensa que tiene este animal es su mandíbula, así que al sentirse asustado y en un ambiente nuevo, intenta defenderse de quién después verá como su congénere.
Una vez hemos acostumbrado al hurón a nuestras manos, rara vez volverá a morder a un ser humano, aunque es verdad que su juego básico son los mordisquitos, éstos siempre serán flojos y sin ninguna mala intención.
Si vamos a sacar a nuestro hurón a la calle o al campo, deberemos tener todas las vacunas al día, como el moquillo y la rabia, ya que de lo contrario podemos encontrarnos con una visita de urgencia al veterinario por haber contraído nuestro hurón, alguna de estas enfermedades. Si por el contrario vamos a disfrutar de nuestra mascota en casa, con vacunarlo durante el primer año será suficiente.
El hurón es un animal que duerme mucho, se pasa aproximadamente entre 18 y 20 horas durmiendo. Las horas que está despierto, está realmente muy activo, así que lo veremos corriendo, saltando e investigando todos los rincones posibles. Deberemos tener al hurón bajo vigilancia si lo sacamos de la jaula, ya que existen muchos riesgos para ellos en nuestro entorno, como por ejemplo pueden colarse detrás de un electrodoméstico, irse por un desagüe, saltar por la ventana o el balcón, meterse dentro de un cubo de agua, morder cables eléctricos…
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